San Bernardo (Istock)

San Bernardo

Su gran tamaño lo convierten en una raza imponente, pero nada más lejos de la realidad. El San Bernardo es una raza tranquila y relajada a la que le gusta jugar y recibir cariño de los suyos. Una elección muy acertada sobre todo si buscas un compañero con el que compartir los días sin ningún tipo de incidente.