Compartir tiempo de calidad con nuestro perro es una de las mejores formas de fortalecer el vínculo y asegurarnos de que se mantenga feliz y saludable. Muchas veces pensamos que para que nuestro peludo se divierta y haga ejercicio hace falta salir de casa o comprar juguetes caros, pero lo cierto es que existen infinidad de juegos caseros sencillos que puedes hacer usando objetos que ya tienes en casa. Estos juegos no solo entretienen, sino que también estimulan la mente de tu perro y le ayudan a liberar energía de forma positiva.

La importancia del juego en casa para tu perro

Los perros necesitan actividad física y mental cada día, especialmente si pasan muchas horas en casa. El aburrimiento puede llevar a problemas de comportamiento, ansiedad o incluso a la aparición de conductas destructivas. Por eso, dedicar unos minutos diarios a jugar con ellos es fundamental para su bienestar general. Además, el juego en casa es perfecto para días de lluvia, frío o cuando no puedes salir tanto como te gustaría.

1. Escondite de premios

Uno de los juegos más sencillos y efectivos es esconder premios o trozos de su comida favorita por la casa. Deja que tu perro te vea esconder uno o dos, y después aumenta la dificultad escondiéndolos en lugares más complicados. Este juego estimula su olfato y le mantiene entretenido mientras busca los premios.

2. Juego de las cajas

Aprovecha cajas de cartón vacías para crear un pequeño circuito o laberinto. Puedes meter dentro pelotas, juguetes o premios y dejar que tu perro investigue. Las cajas también sirven para que se meta dentro y juegue a entrar y salir, algo que suele encantarles.

3. La cuerda de trapo

Haz una cuerda trenzando camisetas viejas o trozos de tela. Jugar a tirar de la cuerda es ideal para que tu perro libere energía y además refuerza su mandíbula. Eso sí, recuerda que debe ser un juego controlado: si tu perro se excita demasiado, es mejor hacer una pausa.

4. ¿Dónde está el juguete?

Elige uno de sus juguetes favoritos y escóndelo mientras tu perro espera en otra habitación. Después dile que lo busque. Cuando lo encuentre, prémiale con caricias y palabras. Este juego refuerza la obediencia y ejercita su mente.

5. Circuito de obstáculos casero

Con sillas, cojines y mantas puedes montar un pequeño circuito de obstáculos en el salón. Invítale a saltar, pasar por debajo de las sillas o rodear objetos. Este tipo de actividad mejora su agilidad y coordinación, y es muy divertido para ambos.

6. Jugar a la pelota

No hace falta tener un jardín enorme para jugar a la pelota. Si tienes un pasillo largo o una habitación despejada, puedes lanzar la pelota para que la traiga de vuelta. Además de liberar energía, tu perro trabajará la obediencia si le enseñas a soltar la pelota al dártela.

7. El juego de los vasos

Coloca tres vasos o recipientes boca abajo y esconde un premio bajo uno de ellos. Deja que tu perro los huela y elija bajo cuál está el premio. Este juego estimula su olfato y su capacidad de concentración.

8. Tira y afloja con peluches

Si tu perro tiene algún peluche resistente, juega a tirar y aflojar. Es una forma estupenda de reforzar vuestra relación y de que el perro haga ejercicio físico. Recuerda, siempre debe ser un juego y nunca una pelea de fuerza.

9. Aprender nuevos trucos

La estimulación mental es tan importante como la física. Dedica unos minutos a enseñarle trucos nuevos, como dar la pata, rodar o hacerse el muerto. Utiliza premios y mucha paciencia. Verás cómo tu perro disfruta aprendiendo y se siente más seguro.

10. Buscar la comida en toallas

Extiende una toalla en el suelo, coloca premios encima y enróllala. Deja que tu perro la desenrede con el hocico y las patas para conseguir los premios. Es un juego sencillo pero muy entretenido que agudiza su ingenio.

Consejos para jugar en casa con tu perro

Antes de empezar, ten en cuenta la edad y el estado físico de tu perro. Adapta la intensidad y tipo de juego a sus necesidades. No fuerces a tu perro si ves que se cansa o no le interesa un juego en concreto. Lo importante es que ambos disfrutéis y paséis un rato agradable juntos.

Recuerda que el juego en casa no solo sirve para entretener a tu perro, sino que también es una oportunidad para mejorar su bienestar emocional y físico. Dedicarle tiempo cada día es una inversión en su felicidad y en vuestra relación. Prueba estos juegos caseros y verás cómo tu perro está más contento y relajado.