Los gatos son animales curiosos por naturaleza y mantener su mente ocupada es clave para que estén felices y sanos. Aunque solemos pensar que solo necesitan juguetes o rascadores, existen muchas maneras de estimular mentalmente a nuestro felino sin salir de casa. Si notas que tu gato se aburre, está apático o incluso se porta mal, puede que le falte algo de estimulación. Aquí te mostramos cinco formas sencillas y efectivas para mantenerle entretenido y potenciar su inteligencia desde la comodidad de tu hogar.

1. Juegos interactivos y de inteligencia

Los juegos interactivos son una de las mejores herramientas para estimular la mente de tu gato. Existen en el mercado juguetes tipo puzle donde el gato tiene que descubrir cómo sacar una golosina o su pienso favorito. Este tipo de juegos les obliga a pensar, analizar y probar distintas estrategias para conseguir la recompensa. Puedes encontrar desde tableros con piezas deslizantes hasta bolas dispensadoras de premios. Alterna los juegos para que no se acostumbre siempre al mismo y mantén el reto interesante.

2. Esconde premios por la casa

El olfato es uno de los sentidos más desarrollados de los gatos. Utilízalo a tu favor escondiendo pequeñas cantidades de comida o premios en rincones accesibles del salón, habitaciones o incluso dentro de cajas de cartón. Así, tu gato tendrá que buscar, olfatear y usar el ingenio para encontrar su recompensa. Este juego de «búsqueda del tesoro» es muy fácil de preparar y puedes hacerlo cambiando los escondites cada vez para que siempre sea un reto diferente.

3. Zonas de observación y enriquecimiento ambiental

La observación es otra forma de estimulación mental fundamental para los gatos. Si puedes, coloca un rascador alto o una estantería cerca de una ventana para que pueda mirar el exterior. Ver aves, coches o simplemente el movimiento de las hojas es un pasatiempo que les mantiene atentos y les ayuda a evitar el aburrimiento. Complementa su espacio con cajas, túneles o mantas para que exploren y se sientan estimulados también físicamente.

4. Rutinas de juego con cañas y plumeros

Dedica cada día un rato a jugar con tu gato utilizando cañas, plumeros o pelotas. Estos juguetes que simulan presas en movimiento despiertan su instinto cazador y les animan a planear emboscadas, saltar y correr. Cambia el tipo de juguete de vez en cuando y escóndelos tras los muebles o debajo de mantas para que el reto no sea siempre igual de sencillo. Jugar con tu gato refuerza vuestro vínculo y le ayuda a liberar energía mental y física.

5. Enseña trucos y utiliza el clicker

Contrario a lo que muchos piensan, los gatos pueden aprender trucos y órdenes sencillas. Aprovecha el refuerzo positivo y enseña a tu gato a dar la pata, sentarse o acudir a la llamada usando premios y un clicker. Estas sesiones de adiestramiento, además de divertidas, son un excelente ejercicio mental y una oportunidad para pasar tiempo de calidad juntos. Empieza con sesiones cortas y mucha paciencia, verás cómo tu gato es capaz de sorprenderte.

Recuerda que cada gato es un mundo y lo importante es observar qué actividades disfruta más tu compañero felino. Alterna los juegos, introduce novedades y dedica un tiempo diario a estimular su mente. Así conseguirás que tu gato esté más equilibrado, feliz y con menos tendencias a aburrirse o desarrollar comportamientos no deseados. ¡Anímate a probar estas ideas y verás los beneficios en su día a día!